16 de noviembre de 2011

TRAVESIA PADRE E HIJOS 2011




Salimos el sábado 12 de Noviembre a las 10 hs. del Parador Tajes, sobre el Santa Lucía. El día estaba hermoso.


El grupo estaba constituído por 22 adultos y 15 niños (menores de 15 años). Ignacio y Federica fueron en la Leo, Martín fue remando en el despelote con un niño que lo acompañó y Marcos fué conmigo en el Banana Boat con motor y estabilizadores.
Luis (el rey) acampó el viernes en el Puerto Chiquitúa con la Caracola y su flía. y nos vino a buscar a la salida en el chinchorro para ayudarnos con la carga.
Así partimos en una corta travesía que no duró más de dos horas.
Subimos por el Arroyo La Lista hasta la bifurcación y ahí doblamos hacia la derecha para encontrar a unos 200 metros el puerto Chiquitúa en donde acampamos y disfrutamos el resto del fin de semana. El año anterior lo habíamos hecho en el La Isla El Pajarero, sobre el Río San José.

Después de armar campamento, almorzar y descansar un poco comenzamos con la primera actividad, LA TIROLESA.


La Tirolesa colgaba de un lado al otro del arroyo y los niños se tiraban cayendo directo al agua. La diversión incluía un buen baño en el arroyo.


Un grupo muy heterogéneo en edades, donde participaron hombres y mujeres por igual. El Abuelo Filipini vino preparado con muchas actividades, trajo mojarreros para todo el mundo, pero los peces estaban ariscos de salir. También trajo bolsas para carrera de embolsados y otra cantidad de juegos que ocupó toda la tarde del sábado.
Con Marcos nos mandamos una excursión de pesca. Y, aunque solo tres mojarras salieron, en ésta oportunidad me conmovió la frase de Marcos "Papá, yo vine a disfrutar un tiempo junto con vos y eso estamos haciendo ahora!!". Hermoso, ¿no?

No faltó la GRAN FOGATA, mucha leña de un buen servicio de fuego. Como es lo que me gusta, inicié el fuego para calentar agua y después seguir con la parrilla. Colita de Cuadril y chorizos abundaron y también las hamburguesas que se prepararon para los niños.

¡¡Que lindo el fuego!!!, nos da calor, nos alumbra y sobre todo nos entretiene, como buen televisor criollo. Varios trafogueros cruzados nos permitieron mantenerlo prendido hasta que nos fuimos.

Varios recibimos una paliza de truco de Hugo y Martín cuando se hizo la noche y nos alumbrabamos con los discos led colgados.

El domingo tempranito Diego comenzó a amazar para las tortas fritas, que ricas que estaban!! La parrilla servía de escurridor a medida que se sacaban de la olla.

Las ensaladas sin problemas, estaban prontitas, así que disfrutamos de un variado menú. de carnes y ensaladas.




Las actividades del Domingo incluyeron canopolo de Adultos  y Padres e Hijos y una excursión en canoa con bautismo incluido. Marcos llegó empapado!!!


De tarde nos pegamos una siestita con Martín mientras los niños jugaban con el cuidado de varios adultos. Luego, el sorteo de premios, toda una tradición en el ACAL, y comenzó la operación retorno. A dejar el campamento impecable para el disfrute del próximo que vendrá.



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